¿Quién diseñó de verdad la bandera entrerriana?
Varias provincias guardan los colores como emblema de unidad, en reconocimiento a la misma fuente histórica en la Liga Federal. El aporte poco conocido de José María de Roo.
Para el estudioso Jacinto Carranza la Bandera de Entre Ríos fue izada por José Artigas en Arerunguá (Banda Oriental), el 13 de
enero de 1815. Dos meses antes que en Montevideo. Si es así, podemos decir que
nuestra bandera nació tres días después del combate de Guayabos (10 de enero de
1815), central para las luchas federales. Y casi un año después de la Batalla
del Espinillo, cerca de Paraná, ocurrida el 22 de febrero de 1814, fundacional
podríamos decir del federalismo en la región. (Aunque antes hubo choques en
Mandisoví, cerca de la actual Federación).
Artigas tenía en
Arerunguá (cerca de Guayabos) su Cuartel General. Y dicen los historiadores
orientales que allí cultivaba también una honda relación con los pueblos
charrúas.
Otros sostienen que nuestro emblema de la franja
roja diagonal fue izado el 3 de enero de 1815 y Carranza lo niega y lo
fundamenta.
La segunda vez que se alzó la tricolor fue en
Saladas, Corrientes, un 17 de enero de 1815. Eso afirma Jacinto Carranza. Y
para celebrar la victoria federal de Guayabos donde, según la historiadora
Beatriz Bosch, nació el federalismo, aunque en verdad su origen guerrero está
un poco antes, en el Espinillo.
El tercer izamiento ocurrió en Entre Ríos, el 1ro.
de marzo de 1815, afirma Carranza, y aclara que es errónea una publicación que
ubica ese hecho el 1° de marzo de 1814.
En cuarto lugar se enarboló en Santa Fe el 24 de
marzo de 1815. En quinto orden, en Montevideo el 26 de marzo, como decíamos al
principio, y por sexta vez en Córdoba el 28 de marzo de 1815. Lo de Misiones,
al parecer y según este autor, sería más confuso.
Vale insistir en el orden: Arerunguá, Saladas,
Entre Ríos, Santa Fe, Montevideo, Córdoba. Lo dice Carranza en su obra La
Tricolor de Artigas.
Diseños diferentes
Entre el 13 de enero y el 28 de marzo de 1815 el
pabellón con una franja roja ya flameaba en toda la Liga de los Pueblos Libres.
Pero ¿con qué diseño? Todas las regiones incorporaron el rojo, pero las
banderas fueron distintas. Y es que la misma descripción de José Artigas dejaba
algunas dudas.
En
un oficio al gobernador de Corrientes José de Silva, del 4 de febrero de 1815,
dijo Artigas: “si para simular este defecto han hallado el medio de levantar en
secreto la bandera azul y blanca, yo he ordenado a todos los pueblos libres de
aquella opresión (alude a la del gobierno lautarista unitario monárquico de
Buenos Aires), que se levante una igual a la de mi Cuartel General, blanca en
medio, azul en los dos extremos y en medio de estos unos listones colorados,
signos de la distinción de nuestra grandeza, de nuestra decisión por la
República y de la sangre derramada para sostener nuestra libertad e
independencia. Así lo han jurado estos beneméritos soldados en trece de enero
de este presente año después que se creyeron asegurados por hacer respetables
sus virtuosos esfuerzos”.
Hubo
entonces diversas formas de incorporar el rojo, pero distintas razones
afianzaron la banda diagonal.
Hay
testimonios que confirman el diseño con un trazo encarnado desde el ángulo
superior izquierdo hasta el ángulo inferior derecho. Por ejemplo: esa bandera
apareció en el escudo de la Provincia Oriental creado en 1816.
Muerto José Artigas en su exilio del Paraguay, sus
restos fueron repatriados y un hijo de José María de Roo pidió en noviembre de
1856 que la urna funeraria fuera cubierta por la bandera de banda roja que
diseñara su padre.
El presidente de la nación, Gabriel Antonio
Pereyra, aceptó porque él mismo había sido testigo del izamiento en 1815. Era,
pues, la de banda roja oblicua que hoy flamea en todo el territorio
entrerriano.
No pocos orientales han expresado su deseo de que
sea este emblema, por su historia, por sus significados, el que los exprese en
el concierto de las naciones.
José María de Roo
Pero
¿quién fue ese José María de Roo, a quien se atribuye el diseño de nuestra
bandera?
Digamos
que cada 19 de Junio celebremos el Día de la Bandera Federal en homenaje al
nacimiento de su creador, José Artigas.
En
su obra, Jacinto Carranza dejó dudas sobre el momento preciso en que fue izada
en Entre Ríos, enumeró los distintos diseños y sugirió que quizá sea ésta la
gran bandera de nuestra América en el cono sur.
Para
el paranaense Juan Vilar, esta bandera de banda roja tiene más historia que la
bandera argentina, porque flameó en libertad, mientras que la creara por
Belgrano era ocultada por orden de Buenos Aires.
Carranza
mostró los distintos diseños, y documentó que el más generalizado fue el que
tiene hoy la bandera de Entre Ríos.
Dijo
Carranza: “la primera tricolor Artiguista que ondeó a las seis de la mañana del
día 26 de marzo de 1815 ‘en los baluartes de la antigua Ciudadela’, o ‘en el
cabildo y en las demás dependencias de esta capital’, fue hecha bajo la
dirección y por cuenta de Don José María de Roo”. Hablaba, claro, del izamiento
en Montevideo.
Agregó
Carranza: “el izamiento de esta bandera tuvo lugar ejerciendo el gobierno
político y militar de la plaza el Coronel Don Fernando
Otorgués. Cumpliendo órdenes de éste, su Secretario General, don Juan José de
Aguiar, procedió ‘a levantar por primera vez en el Cabildo y en las demás
dependencias el pabellón tricolor, emblema de la independencia del pueblo
oriental, excluyendo para siempre el español, que desde la conquista hasta la
víspera de ese día había en ellas flameando”.
“A las seis de la mañana del citado día, en salva
jubilosa tronaron los cañones de las baterías; manos de ‘patrias’ sacudieron
los badajos arrancando a las campanas repiques de gloria. Entre tanto, en esa
grata hora de redención, acariciada por la luz solar naciente, bajo el dosel de
un limpio cielo azul turquesa, ondeaba a los vientos del pago esa simbólica,
típica enseña de la PLATINIDAD, cabal, genuina expresión del grandioso
PROTECTORADO DE LOS PUEBLOS LIBRES, destinada, antes que al prosaico cometido
de cubrir la mercancía, a irradiar sobre todo el continente americano, el
derecho de auto determinación de sus populares soberanías”. (Las mayúsculas son
de Carranza).
Un demócrata
José María de Roo “venía actuando en la vida
pública montevideana desde 1787,”, dijo Jacinto Carranza. Y mencionó un trabajo
de Plácido Abad sobre José Maria de Roo: “era el viejo administrador aduanero,
un hombre aficionado al dibujo, con nociones de heráldica, según así lo
atestigua la información dejada a su fallecimiento, habiendo colaborado con Antonio Acosta y
Lara, antiguo marino y jefe de punto de la Capitanía y Aduana de Montevideo, en
la preparación de lo que dio en llamarse el telégrafo de señales, que permitía
comunicarse con los buques, como se hace aún actualmente cuando falla el telégrafo
sin hilos”.
(No
tenemos la fecha en que Abad escribió esto en un suplemento semanal del diario
La Mañana N° 352).
Y
siguió Abad: “Parece ser don Jose María de Roo el verdadero creador de la
bandera tricolor, con sus aficiones especiales a esta clase de trabajos y
dibujos, adquiridos en su vida constante en la Aduana de Montevideo, y su
convivencia con los marinos que arribaban a la plaza durante el poderío
español”.
Jacinto
Carranza continuó: “años después, este patricio (de Roo) en su carácter de
Regidor Decano al frente del Juzgado de Primer Voto, integró el cabildo de
1822, el mismo que luego de desconocer la intrusa, monárquica autoridad
cisplatinesca del Barón de la Laguna, acordó que el ayuntamiento de 1823 fuera
representativo, vale decir, que sus miembros habrían de ser electos por
sufragio popular, práctica esencialmente democrática concorde en un todo con la
gran trayectoria cívica trazada por el inmortal Blandengue”.
La Patria Grande
Carranza dijo algo más: “este magnífico pabellón
Artiguista, es la única y verdadera enseña de la Patria, de la Patria Grande,
con fronteras en los límites del tratado de San Ildefonso. Este pabellón
(siendo el del Protectorado de los Pueblos Libres, o sea, el de la PLATINIDAD,
el de los estados Unidos del estuario, mancomunados por el atridismo federal, a
no haber mediado, ora la ceguera, ora el desorbitado afán hegemónico de las
camarillas oligárquicas bonaerenses, monarquistas-unitarias), cubriría bajo sus
pliegues lo que hoy es la Argentina, Bolivia o el Altiplano, Paraguay y nuestra
República en toda la primitiva extensión territorial heredada de España, la
bizarra y gloriosa madre, por todas estas ex secciones del dilatado
Virreinato”.
Lo de Carranza es claro: si no fuera por el poder
porteño, la banda roja sería el emblema del Uruguay, la Argentina, Bolivia y
Paraguay.
Fechas inolvidables
Jacinto Carranza publicó la carta de Fernando
Otorgués al Cabildo de Montevideo para que sus integrantes asistieran a la
ceremonia. “Para las seis del día de mañana he dispuesto se orle la bandera
tricolor en esta fortaleza. V.E., que tanta parte toma en las glorias de esta
provincia, no dudo se dignará asistir a este acto tan honroso al nombre
oriental. Dios guarde a V.E. muchos años. Montevideo, marzo 25 de 1815.
Fernando Otorgués”.
Y el Cabildo contestó: “Por lo que V.S. se sirve
comunicar a este Ayuntamiento, con fecha de hoy, para la concurrencia a las
seis del día de mañana, tendrá mucho honor en asistir a un acto tan laudable y
que honorificará a todos los orientales”.
Para entonces, ya hacía dos meses y medio que el
paño había sido izado en Arerunguá.
Esos colores son distintivos de varias provincias
argentinas. Hay dos banderas de banda roja: la de Entre Ríos y la de La Rioja.
Esta última es más reciente.
El rojo tiene muchos significados pero
principalmente alude a la república, el federalismo y la sangre derramada por
la independencia. Lo lleva la bandera de Santa Fe (tres franjas verticales,
roja a la izquierda, blanca en el medio, azul a la derecha, y un polémico escudo
en el medio).
También la de Misiones, que es el emblema de Andrés
Guacurary (tres líneas horizontales roja arriba, azul al medio, blanca abajo),
y la de Córdoba, reformada en 2010. Esta tiene tres bandas verticales: la
izquierda roja, la del medio blanca con un sol en el centro, y azul celeste la
de la derecha. Las banderas de Córdoba y Santa Fe son muy parecidas, y el tono
de sus colores guarda similitud con la bandera entrerriana: eso está escrito, y
tiene el propósito explícito de resguardar esa unidad. Todo en homenaje a sus
fuentes en la Liga Federal.
Daniel
Tirso Fiorotto – UNO – Domingo 20 de Junio de 2021